Como experto en suministro térmico y vapor de planta, Armstrong International le ofrece productos, programas y servicios inteligentes para maximizar la eficiencia, mejorar el desempeño y la seguridad, y reducir su huella de carbono.
Algunas de las empresas más grandes y respetadas de la industria farmacéutica recurren a Armstrong como su socio de suministro térmico de confianza. Somos líderes globales en administración de energía, con ingenieros experimentados en localidades de todo el mundo, preparados para satisfacer las necesidades de su industria y resolver los problemas específicos de cada región a los que se enfrenta, día tras día.
Armstrong lo hace todo: desde trabajar con usted en estudios integrales de los sistemas de suministro térmico de su planta, hasta ingeniería personalizada y las soluciones “llave en mano” para instalaciones nuevas y existentes.
Como experto en vapor y condensado, agua caliente, medición de flujo y transferencia de calor, Armstrong pone a su alcance productos robustos y confiables, tecnología y software de última generación, y sistemas y servicios diseñados a la medida que satisfacen los requisitos más estrictos de la industria farmacéutica. Nuestros expertos trabajarán con usted en las actividades diarias de mantenimiento, reparación y mejoras del sistema para que sus instalaciones se mantengan funcionando sin problemas y de manera eficiente.
Armstrong pone el net zero al alcance de la mano
Armstrong está listo para ayudar a las empresas farmacéuticas con objetivos de aumentar la sustentabilidad, reducir la dependencia de los combustibles fósiles y disminuir las emisiones al medioambiente. Diseñaremos un plan de acción personalizado que lo conduzca en su transición al net zero y más allá.
Nuestra avanzada metodología de eficiencia de sistemas de vapor cuenta con las aprobaciones de las Naciones Unidas y el Protocolo de Kioto.
La metodología de Armstrong para lograr la eficiencia del sistema de vapor, que se relaciona con las trampas de vapor, ha sido aprobada por la Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), y la nuestra es la primera metodología de eficiencia que se aprueba por el comercio internacional de emisiones de dióxido de carbono (CO₂) en virtud del Protocolo de Kioto.
